Cleopatra

Se nota cuando la luna está creciente
Aunque sea de día
Hay muchas cosas que no se ven
Solo se sienten
Y confiamos en que están
Y tú te sientas en el bordillo con un café que humea
Que parece que susurra con nosotras y no le oímos
Porque hace mucho frío y nuestra risa también es vaho
Que se confunde frente a la nariz con el humo de los cigarrillos
El invierno nos acaricia la cara, helado como los dedos del miedo
Pero nuestras mejillas arden, como las de un marinero en su noche libre
Y esa serpiente de incertidumbre que se nos enrosca en el cuello
Huye dejando su muda de piel en nuestra piel
Y esas escamas de dudas nos protegen
Porque cuando vuelve se ve como en un espejo
Y hablo de esa piel de gallina que creían de cobardes
Se equivocaron otra vez, como la paloma de Alberti
Cuando creen que no podemos, se equivocan siempre ellos
Esa piel erizada es nuestro traje de guerrero
Y estás tan guapa cuando te lo pones entero
Que le estamos ganando poquito a poco la guerra al invierno
Míralo ahí en un rincón, muriéndose de frío

Menos de un cigarro

Esa luna que tanto admiras
Y miras, y miras, y miras
No es más que un trozo de piedra que flota
Chupando luz de otro
Como el enganche de un okupa
No deja que te des cuenta
Pero cuando tu boca se desnuda
Y dices "me quedo"
Te mira
Y te admira, te admira, te admira
La luna, envidiosa de ti

Que no te das cuenta que el aire
Para vivir te respira
Que los marineros de Ulises
Pasarían miedo navegando entre tus costillas
Que cuando llegas
Callo a Nina Simone y me quito los cascos
Porque ¿qué me va a contar ella
de "feeling good"?
Y se me enciende dentro una luz carmín
Como la del revelado de fotos
O la de los burdeles
Incendiándome por dentro
Y me crecen en la garganta cascabeles cuando te vas
Que suenan a banda sonora de escena de despedida
De película en blanco y negro de cine francés
Y me entra sed
De beberte, de verte
Y me pongo a buscar entre la gente
Lo sideral de tus pupilas
Pero hace un ratito que te has ido
Y el cuello de mi camiseta ya no huele tanto a ti
De cuando te acercas a mi oído y respiras
-A veces creo que puedo oír el mar-

Quizás no entiendes que como más me gustas
Es conjugando verbos en presente
Que tengo miedo de que estés y no estés
Que me veas y no me mires
Que me escuches y no me creas
Todo a la vez
Porque sé que me lo merezco
Pero te juro nena, que de todo lo que quiero
Eres lo primero
Y el resto
Lo quiero contigo
Quédate

Postdata: Siento haber insultado a la luna
Pero estoy cansada de mirarla
Y no me sirve ni como sucedáneo
A mirarte a ti dormir

Pájaro rebelde

La vida es una ruleta rusa
Pero las balas a veces son de fogueo
Y ves el disparo apuntando a tu cuerpo
Pero no choca
Y durante ese segundo eterno
Te sientes una puta molécula en el universo
Y así es como con esta metáfora idiota
Describo como puedo
Cómo me siento cuando creo que te pierdo
Y hago que mis poemas sean espejos
Que no necesitan tenerte en frente para que se te vea
Si te desnudo con palabras es por todas las noches que aún me queda
Hacértelo con las manos
La luna hay que verla siempre medio llena
Y si el viento nos sopla de frente
Joder, qué guapa estás despeinada
Y nadando a contracorriente
Es como se llega a lo más alto de la montaña
Donde nacen los ríos
Que fluyen como por mis venas las ganas
Y aún me despierto en mitad de la noche
Y confundo mi cama con arena de la playa
Y te busco a tientas a mi lado
"Esta noche no, inocente"
Susurra la almohada y me abraza
Y mi pulso añora tus dedos
Tentándolo a dispararse como metralla
En nuestra guerra donde los únicos muertos
Son esa gente sin alma
Que confunde los "quieros" y "puedos"
Y no lucha, y no gana
Yo solo saco bandera blanca cuando bailas
No tengas prisa en volver de la pista
Desde aquí te observo

Toda la verdad

Un gato cuando entra en un callejón sin salida
Trepa a un muro y se va
Yo no soy un gato, y me he chocado
Y como no lo rompa a cabezazos
No voy a saber nunca qué hay detrás
Pide un deseo y apaga la luz
No quiero dejar que ni una noche duermas sola
Tengo fe en lo que dice el pulso de tu cuello
Y en vez de una cruz
Llevo en el pecho un búho que vigila
Que no se me escape ni un "me rindo" de la boca
Y por tu ventana entran volando mis ganas
Y las agujas del reloj pinchan los globos
Para que no haya ni una fiesta
Cuando tú no estás
Y estoy callada y tengo miedo
Como el primer día de colegio
Y me bebo tu despedida
Como en el bar de un aeropuerto
Sola y con dos hielos
Que representan tus ojitos de cristal
Y mi alma se levanta a protestar
Dejándome vacía, sentada en el sofá
¿No te das cuenta que tenemos mil razones?
Que yo puedo ponerle tres puntos suspensivos
Y tú tres de sutura
A estos pobres corazones
Que solo quieren escapar
Y se nos da tan bien ser feliz
Que no tenemos que tirarnos por el acantilado
Porque algo nos persiga
Como a Thelma y Louise
Que te advertí que era un desastre
Pero si me das la mano no voy a soltarla
Y saldremos de esta
Confía en mí

Pandia

Como ya teníamos tus ojos, apagamos la luz
¡Cuántas ganas saltando como chispas en las yemas de los dedos!
Fuera el viento tarareaba una oda a la lluvia
Tú me dijiste tímida, pueril, como tú sabes
Que ya no le tenías miedo
"Ya no me da miedo" como un hilo de voz de miel en el silencio
Y que nos bañásemos bajo su llanto
Y que me enseñases a bailar cuando llegue el invierno
Que desnudarnos de temores en la misma almohada
Eso sí es poesía, y no estos versos
Y palpar con la boca tu pulso
Tamborileando canciones de guerra en tu cuello
Que querías hacer noche en mis ojeras
¿Y yo a tal cosa cómo me niego?
Mientras apurabas tu cigarrillo a oscuras
Tan musa y tan niña, expirándolo lento
Godard me poseía a cada parpadeo
Y en tu nube de humo desaparecía como un ninja
Para poder colarme entre tus costillas
Y quedarme dentro

Debajo del tobogán de la playa

Hay en la toalla unas lucecitas
Como los barcos pesqueros a lo lejos
Y me acerco
No hay muchas estrellas
Solo unas pocas
Que no te quitan protagonismo en esta obra
Tengo arena entre los dedos
Y las orejas
Y el pelo
Y el ombligo
Y los dientes
Y nos reímos porque los besos
Como nuestras almas
Estan crujientes como un papel de versos en sucio al arrugarse
Y no sé si es el faro o son tus ojos
Pero unos focos me miran
Me desnudan y me guían
Y la luna alumbra esta noche que parece una bombilla
Y derrama sobre el mar la luz que le sobra
Y tus manos en mi espalda llevan la misma seguridad
Que cuando coges el palo del billar y me machacas
Pero de esa niña tímida
Aun quedan restos como trozos de cristal
Que me cortan con sus aristas y no sangro
Porque mi sangre
Esta corriendo por tus venas
Y tarareas "Ain't no sunshine" y me pides que me quede
¿Adonde voy a ir sino?
Que la vida es mas vida
Cuando encuentro en mi recuerdo
Trescientos sesenta y cinco días
Que llevas regalandome versos

Julio

El mar
El mar sabe a curiosidad
Sabe a vodka y a besos
Sabe a inmensidad
Sabe a tu voz pidiendo en voz alta deseos
Para que se cumplan
Que guardándolos en secreto
¿Cómo los voy a saber para podértelos dar?
El mar sabe a resaca y a ganas
A luz y a recuerdos
El mar sabe a ti
Y también un poquito a sal

Entre caladas calladas

Dos manos de mujer sobresaliendo de una ventana
Sirviendo de guarnición entre el cielo y el suelo
Con un cigarrillo para cada una
Consumiéndose entre los dedos
Y ceniza cayendo al vacío como pequeñas mariposas de muerte
Al otro lado de ese hueco en mitad del ladrillo
Cuatro rodillas apoyadas en el colchón
Con los dedos de los pies encogidos por el frío
Y tu mirada ardiendo porque el marrón de la mía
Le sirve como madera para la combustión
Y sé que no sabes cual de tantas noches estoy describiendo
Porque ni siquiera lo sé yo
Pero ya quisiera la rutina que eso se llamase rutina
Ya quisiera la costumbre que me acostumbrase
A cuando apagas el cigarrillo y te tumbas en la cama
Mirándome como una niña
Que sabe perfectamente lo que hace

Radiografía

Piel de pan tostado y mermelada de su boca
El amazonas en sus ojos
Me miraba tan triste...
Julio Romero de Torres hubiese creado algo grande
Pero yo no sé pintar
Y como no soy más que un cordero con piel de lobo
Me limitaba a temblar
Y a sostenerle la mirada, como ese punto fijo
Que me aconsejaban de pequeña que mirase
Para mantener el equilibrio
Aunque siempre fui tan distraída
Que me acostumbré a los rasguños de caer
Y al betadine en las rodillas
Lo que nunca nadie me dijo
Es que no todas las heridas se ven marcadas en la piel
Lo supe cuando ella sentenció despidiéndose
Y unos músicos callejeros desafinan Fly me to the moon
Mientras vuelvo a casa perdida y sabiendo el camino
Tropezando con mis pies
Buscando su mirada triste tras cada esquina
Para pedirle que me deje quedarme esta vez
Que si ella se queda, respiro
De su aliento se alimentan mis pulmones vacíos
Que el pasado por más que corra, nunca podrá ser puntual
Nos persigue, pero no nos puede hacer daño
El pasado ya ha pasado
Como el tren de las seis y cuarto en San Bernardo
Quizás para el próximo lleguemos a tiempo
Ve haciendo la maleta

4:16 am

Hace diez meses a esta hora
Yo había muerto y estaba en el cielo
-A pesar de que no había sido buena-
En mis dientes crujían los granos de arena
De habernos recreado en la playa a besos hambrientos
A veces respirando a mil por hora
A veces ahogando suspiros
A veces conteniendo el aliento
Mientras nos arrancábamos la ropa
Y mimábamos al silencio
Para no despertar a todo el hotel
El espejo del baño empañado ¿lo recuerdas?
Debí haber escrito sobre él mi testamento
No se me ocurre lienzo más perfecto
Pero en ese momento no podía pensar demasiado
Era una alpinista por tu espalda
Que a la vez que se encontraba se perdía
Tu cuerpo era quimera de mujer y felina
Tus ojos, sin embargo, eran los de una niña
Y yo muriéndome de vida
Tumbadas en el suelo
Creando un contraste tan bello
Que nos sanó todas las heridas
Que traíamos por nuestra cuenta
Mejor que la sal del mar
Dos desconocidas
Una primera vez
Una madrugada que duró un segundo
Tu voz diciendo "quédate"
Nos amaneció sin darnos cuenta
Mientras creamos una historia
Una noche como esta
En una habitación de hotel

Capaz

No es más que un colchón en el suelo
Que sería un colchón en el cielo
Si estuvieses aquí
No es más que un segundo
El tiempo que necesito
Para saber que sí
Que sí, que una toalla contigo en la arena
Fue mejor cama que la de María Antonieta
Que lo de que los lujos son caros
Es un cuento que ya solo se creen las princesas
Que a mí no, ya no me engañan
Con lo bien que me queda tu piel
No necesito ropa de marca
Mi nariz en tu cuello se ríe de un perfume de Chanel
Y una primera fila en la ópera aburre
Al lado de tu boca diciendo "desnúdame"
¿Y champagne para qué?
Cerveza fría
Un poco de sol
Un bar cualquiera
Tu compañía
Y si se trata de beber
Yo me emborracho solo mirándote bailar
Cosecha del noventa y tres
Ya quisiera Swarowsky tus ojitos
Niña de cristal
Ya quisieran los que van en limusina
Irse andando por verte andar
Cuando intenté mirar tu precio
En tu etiqueta solo ponía "Cuídala"

Luciérnaga

Te deslizas sigilosa
Y no te importa siquiera
Que sea a plena luz del día
Acaricias las historias
Nuestras historias
Con los dedos más afilados que mis suspiros
Afinados, como un piano de piel y luz
Y sin piedad ni remordimiento
Pero dulce como una niña huérfana de miedo
Algo que creamos, y es tan tuyo como nuestro
Lo muerdes y suena fresco y desgarrado
Como una manzana, como un poema
Como sexo, una carcajada
Como veteranos dedos en un solo de guitarra
Y en el preciso segundo que te apartas
Oliendo aún a tu cuello de vainilla
Observo de lejos cómo me haces falta
Bajando de un salto al vacío el rubor de mis mejillas
Subiendo en picado mis ganas de verte
Buscándome restos de polvo lunar en las manos
Achinando los ojos al verte a contraluz
Hasta dudo a veces si me merezco tanta suerte
No es oro todo lo que reluce, a veces eres tú

Aún más lejos

Te mereces un verso en la boca
Partirte la boca a versos
Te mereces un folio en blanco
Explicando todas las cosas de las que me arrepiento
Me di cuenta de que el sentido de la vida contigo
Era sentido contrario
Y que la colisión, sin testigos
Iba a llegar tarde o temprano
Reventando en pedazos todo lo que algún día fuimos
Y tú despiadada con tu despedida
Me cerrabas la puerta en la cara
Y luego la entreabrías
Para que observara por la rendija
Todas esas cosas que nunca fueron mías
Y no me engañes
Y peor, no te engañes
Que toda esta hermosa mentira
Estaba tan llena de espinas
Que de tanto sangrar me he quedado sin sangre
Ahora no esperes que deje un rastro rojo
Para que lo sigas en mi huida
Y ya no me parto la cara por robarte dos palabras
O un beso que nunca llegaba
Porque no me hace falta
Me roban el sueño planes de sueño
En los que no aparece tu cara
Y tu falso sentimiento de extrañarme
Es un espejismo que saciada mi sed no aparece
Nunca fuiste lo bastante valiente
Para venir a verme
Ni para estar sin quedarte
Nunca arriesgaste, nunca perdiste
Nunca me bajaste estrellas, porque estaban muy altas
Y te daba miedo caerte, romperte las medias
Y mancharte la falda
Yo esperé horas que fueron días, y días que fueron años
Y no aparecías, siempre había una excusa que te salvaba
Y eso, mi vida, eso no es amor
Y ojalá lo aprendas algún día
Porque yo, ahora libre de veneno
He empezado a sentirlo, y es precioso el muy cabrón
Y como te quise, y te quiero, y te querré
Porque mi corazón es tan pequeño que no cabe el rencor
En esta carta de despedida
En lugar de decirte adiós
A ti, pequeña baby blue, te deseo todo lo mejor

Y eso que son ya más de las dos

Qué ganas de que sea verano
Y ahora que todos duermen
Pasear en bragas con un cigarro en la boca
Maldiciendo las altas horas
Y las noches sola
No me apetece pensar en si vienes o no vienes
Que las casualidades me lleven
Adonde me tengan que llevar
Y tampoco me apetece irme a la cama
Pero en este salón sigue haciendo el suficiente frío
Como para que no me de la gana
Seguir acurrucada con los recuerdos del mañana
Que serán mejores
Porque siempre lo son
Así que dejo huérfana a esta madrugada
Apurando la última calada
Que susurra con sus brasas calmadas
"Esta noche no"

Tu cuento antes de dormir

En este mundo hay montones de maravillas
No reconocidas por quienes sean los que las decidan
Una de ellas, sin duda, es tu piel cuando se eriza
Y a mí esos puristas entendidos, no me son relevantes
Para proclamar otras cuantas
Como tus ojos cuando tienen de frente el sol
Y se echan un pulso de luz a miradas
Observarte mientras estudias o cocinas
Tan niña y tan ocupada
Cuando te ríes, me insultas, y te ríes otra vez
Tu vocecilla de ángel por la mañana
Tu boca cuando dice "fóllame"
Tu silueta intuyéndose con la luz apagada
Cuando hay música y cantas en voz baja
Para que sepa que la letra va por mí
Cuando me aprietas la mano porque estás asustada
¿Llevo más de siete ya? ¿Qué más da?
Podría decir mil más
Y hacer un poema kilométrico
No importan ya los números, el tiempo
Las voces neutras de presentador de telediario
Que a estas alturas qué más da
Si miente más el porno o la biblia
Si mis ojos en los tuyos dicen la verdad
Si el pasado hiere, si la vida no quiere
Dejarme olvidar
Si me merezco o no me merezco
Por un lado lo malo
Sentir a veces vacío, la falta de sueño
Y por otro lado lo bueno
Esta burbuja de porcelana
Que moldean tus manos en el hueco de mi pecho
Como dice mi amiga y conciencia
De fuego en la boca y consejos de hielo
Tengo un muro delante y tú estás detrás
Igual me choco, igual lo consigo saltar
Pero yo, ya estoy corriendo

Ludopatía

Tengo un puñado de cartas en las manos
Con pocos oros, y muchos bastos
Que aprovechan mis despistes para darme en la cabeza
No tengo mangas para guardarme ases
Porque hace mucho calor aquí
He apostado un trocito de mi alma y la próxima cerveza
Pero apagas la luz, y hasta las uñas me tiemblan
Cuando me susurras en la oreja
Que ese juego sí te da igual dejarlo a medias
Y con esta prisa por desnudarme
Me hago carreras en las medias
Lunas
Cada noche que me tientas
Un poco más de la cuenta
Que más no te hace falta
Y como por vestirnos no hay prisa
No sabré el final de la partida
No sabré que te había ganado
Y que podría haberme quedado tu apuesta
Que era algo que era mío, y me habías quitado ya
La poca cordura que me quedaba
Mi noción del tiempo
Y un par de gramos de paz
Tú tenías poker
Yo escalera de calor

Geometría

Funambulista por tu columna vertebral
Mi lengua navega pirata por las venas de tu cuello
Después vendrá otra despedida
Pero qué más da
Estás
Y con la persiana hasta abajo
Cuesta saber si aún es de día
No hemos perdido las horas
Las hemos ganado
Y eso que el reloj es un duro rival
Como siempre, apuntas a matar
Pero con el seguro puesto
Y yo esperando un disparo
Que reviente el escenario
Pero se oye solo un click hueco
Y después silencio
Hasta que lo rompamos a besos
Corriendo en círculos hacia el cielo
Como esa noria, ¿te acuerdas?
La ciudad preciosa con sus luces
Y tú, idiota, mirándome a mí
Porque lloraba
Qué absurdo y qué bello
Y si te beso, mal, porque te beso
Y si no te beso, mal, porque te pierdo
Tú de puntillas en equilibrio
Y yo buscando el vértigo
Báilame con las pupilas
Que hoy no hay luna
No te vayas tan lejos
Cuéntame en qué piensas mientras fumas
Mientras yo amordazo a mis miedos
No voy a darte las buenas noches
Pero tú sabes que me quedo

¿Por(qué)no?

Beso tu espalda desnuda en el probador
Y me quedo con hambre
Tentar siempre es tentador
Quiero muy hechas tus ganas
Y cruda tu carne
Me voy a aprender tus lunares por fases
Y las fases lunares
De tanto mirarte
Mejor dame un cigarrillo que entretenga a mi boca
Y el humo la despiste
Para que puedas escaparte
Que hasta el silencio me daría la razón si no fuese mudo
Que no hay nada más peligroso que sentirte seguro
Te espero, no me importa si llegas tarde
Que ya quisiera ser la hora cuando la llevas en el culo
Si los demonios de mi cabeza me dan una tregua
Intentaré explicarte cuanto tiempo llevo perdida
No te pido que me entiendas, solo que nunca te arrepientas
De lo que no fue y pudo pasar
Que con tanta tontería
Hoy no amaneceré contigo
Con tu primera mirada del día
De niña de cristal
Que haría avergonzarse
A las vidrieras de Notre Dame

Cuchillos balísticos

A Lucía

No querías ser el hielo ya
Y mirarla te congelaba
Alguien te tendría que rescatar
Que eres siempre tú quien rescata
Y te fuiste a volar
Y no hablo de la obviedad
De ese trasto de motor y metal
Tú puedes volar cuando quieras
Como una luciérnaga que sale a iluminar la noche
Que es cuando las cosas siempre son más intensas
Y el suelo a estas alturas
Ya no nos interesa
Duerme en tu colchón de plumas
Que se caen de los pájaros de tu cabeza
Que no hay domingo de lluvia
Que pueda con la juventud eterna
Ni hay peso que no se pueda soportar
Cuando llamo a tu puerta
Nunca un apocalipsis fue tan dulce
Ni la hoja de un cuchillo una lengua
Y sus heridas en vez de cicatrices
Son carcajadas de melodía hueca
Quedan cielos que aclarar
Y películas, y decisiones de cerveza
Y hay un búho que te cuida siempre
Aunque tú no te des cuenta

Un cuaderno casi en blanco

Convertí en mi patria donde fueras
Y no te lo dije
No quería que te dieses cuenta
Te di las buenas noches al oído desde lejos
Pero tú dormías y no me oíste
Le puse la sonrisa de ganar a tu reflejo
Cuando pasabas por escaparates
Te esperé por las noches
Para que tocaras "Para Elisa" en mis costillas
Te imaginé despertándote
Dándote besos en el cuello de buenos días
Y yo no quería
Que vieses que me moría tanto
Por imaginarme lo que se nos quedó pendiente
Por tardes viendo libros
Y cigarrillos mentolados esperando a la luna
Te juro que busqué equilibrio
Pero me comieron como pirañas
Por dentro las dudas
Y ya no me pides que te pinte los labios con mi boca
Y tus ojos no se empañan
Si te hablo en un puente de poesía
Ya no me intentas romper levantando la vista
Y la culpa fue mía
Por tener miedo
Por ser tan cría
Y las paredes de Sevilla
Le dan a mis nudillos los besos que no me diste
Me dejaste allí sola
Con lo bien que sabes hacer que no esté triste
Y ya no quisiste quedarte
Y la culpa fue mía
Por no coger tus trenes
Y ahora ya no hay viajes
Y la estación está vacía
Llegué tarde a Selene
Y ahora tengo tanta prisa
En correr sin mirar atrás
Que me parezco un poco a ti cuando te fuiste
Y un camino con farolas me flanquea
Algunas parpadean
Guiñándome un ojo
Riéndose de mi
Y solo tú entiendes por qué

Sal

Quise saber cuanto tiempo quedaba
Y cuando fui a mirar el reloj de arena
El muy bastardo
Me reventó en la cara
Y cada cristal clavado en mi cuerpo
Era un pedacito de ganas
Que estaba perdiendo por el sumidero en el cielo
Que es la luna cuando está apagada
Hay un antes y un después
A ese dolor palpitante
De cuando alguien por primera vez te hace llorar
Y eso es inevitable
Sal concentrada de nuestro mar
En lágrimas que arden en la cara
Tumbada de lado, atraviesan mi puente nasal
Como una cascada de rabia
Como la lava de un volcán
Y tanto silencio desarma a mi orgullo
Y tragármelas es una batalla que sé que no voy a ganar hoy
Pero qué tonta hay que ser para hacerlo todo tan mal
Y una vez deshecha
Qué mala actriz para no saber actuar
No merezco ni un "no lo merezco"
Hasta para mis crímenes fui mala criminal
Qué putada estar pensando qué bragas te estará viendo
Qué mal jugador el que cree que siempre puede ganar
No sé calcular cuanto daño habré hecho
Pero si esto es una venganza
Lo estás haciendo genial
No recuerdo la última vez que grité por dentro tan fuerte
Estás apuntando a matar
Dispárame ya, a ver si tengo suerte
Si me muero antes, me pierdo el final
No me culpes, nena
Que ni tú ni yo servimos para llevar este disfraz

¡1000 visitas!

A Esperanza Castro

Querías ir a mil ahora;
Olerle el humo del tabaco, tan lejos de ti.
Querías ir a mil
a
Su leve pecar de su boca.
Viene tu ansia del querer y no poder,
Del verte reflejada en su mar,
Del dejar de ser bar-
       -ca
¡A mí la guardia!
¡A mil, guardiana!
Quizás sea su boca y su risa,
¡Jay jay! Su risa (sur ella) tan alocada y maleante,
Rebotaba en tu barca como un llanto amorfado;
Es su risa canto egocéntrico
Con cual se crece…
Allá en el cielo le llueve to´l rato.
Querías ir a mil ahora,
A caminar a tientas su cuerpo descalzo.
Ahora mira, ¿Dónde quedó su barca?
Al nivel de tus zapatos.
Ahora eres tú ella, Esperanza de la vida
Ya libre de su llanto.

Nicolás González Morillo

Mare Tranquillitatis

Borra mis huellas
Hazlo despacio y procura que te guste
Te tiento a ello, te animo
Esta noche no te tengo frases bellas
No me culpes, aprecia que al menos lo admito
Vamos, como tú sabes, que truenen tus pupilas
Haz batir las alas al colibrí de tus ojitos
Yo no he sido precisamente buena
No tienes pendiente ninguna deuda conmigo
Saca a bailar a quien quieras, yo espero fuera
Mientras me fumo un cigarro con tu destino
Nunca se me dio bien, dos pies izquierdos
Besos más bonitos se han perdido
Y poco más tengo que decir
No tenía planeado escribirte
Pero ya sabes que soy demasiado fan de las cosas que pasan de imprevisto

Duermevela

En las noches como esta
Que las sábanas se me antojan hiedra venenosa
Y me hiere hasta lo que dice mi eco
Me bajo un ratito al infierno
A buscar un poco de calor entre las demás ánimas okupas
Que encuentran su rincón bajo esas luces de neón
Que rezan "lo inmoral es bello"
Y mientras me coloco con el olor a azufre
Y otras drogas que por allí te ofrecen
Hitler y Jimi Hendrix juegan al ajedrez
Algún bohemio francés
Pinta desnuda a la Virgen María
Y lo que el demonio me habla de ti
Yo luego lo transcribo
Y le llamo poesía
Y nos echamos pulsos de pecados
A veces casi le gano
Y me dice que mi castigo
Es recordar tan bien como lo hago
Tu respiración galopando en mi cuello
Cuando dormías a mi lado
Y me hiela la sangre de repente
Y en esa hipotermia en mi alma
Con magma entre los dedos de los pies
Le dejo ganar para no herir su ego de rey
Pero podría responderle con que él nunca te ha besado
Mojándose la cara con tus lágrimas
Y le ha sabido la boca a mar
Ni se ha rajado con el papel las manos
Cada vez que ha intentado pasar página
Y que todo eso más que castigos
Son pequeños trofeos que se le gana a la tristeza
Que es la única a la que teme belcebú
Porque intentó ligársela
Y ella era aún más perra
De lo que él nunca pudo ser
Así que simplemente le sonrío inocente
Y un poquito vacilona
Para que entrevea lo que me callo
Y un poquito derrotado
Me devuelve una sonrisa burlona
Me pillo un ascensor de vuelta a mi cama
Y relleno el bloc de notas
Con versos que me ayuden a soñar
Cuando tengo que dormir sola

Desglose de este insomnio

En esta ciudad hambrienta de tus pasos
Aún hay calles que recuerdan tu ombligo
Y me instan a pedirte que vengas
Yo les digo que te lo digo
Y que no me haces caso
Y como de tu soberbia ya han sido testigos
Me creen, y se vuelven un poquito más gris

Esta almohada que no es mi almohada
Que nunca llegará a conocerte
Ha oído tu nombre mil veces
Y sin embargo aún no está cansada
Y lee por encima de mi hombro
Cuando te escribo poemas desde aquí
Me pongo de lado
Y me imagino que susurra que todo va a ir bien
Como suelen decir los desconocidos
Que opinan en la ignorancia
De no haber visto nunca tu piel
Pero que quieren ser compasivos con el amor
Sin darse cuenta que él, ese pequeño hijo de puta
No es compasivo con ninguno de nosotros
Como tú cuando te pones melancólica y chula
Que es como más me gustas en secreto

Tantas cosas pendientes no caben en este cuarto
Como si fueran la autopista, y yo el coche
Que quiere ir a toda hostia
Adonde tú estés
Pero está atrapado en un atasco
Me conformaría con tu respiración calmada a mi lado
Qué perfecto silencio de media noche
Qué asco

Heroína

Parece que todo va mejor, de repente
Tiritas y puñales para cada tipo de tristeza
Una ola de calor en mitad de la tormenta
Una cerveza de más, una boca bonita
Un merecido dolor de cabeza
Tú haciéndome un butrón en el subconsciente
Para dar el gran golpe y largarte
Sin dejarme a cambio ni un beso de Judas
Que hasta con eso me conformaría
Tú con los pies en la tierra, y yo queriendo ir a-Marte
Podría escribirte los versos más guarros esta noche
Bendita indiferencia hacia si mientes o no mientes
Más de seiscientos días en picado
Y el minutero un alfiler
Como el recuerdo de las yemas de tus dedos
Quizás no tenga fondo este acantilado
Y la inercia de caer
Es lo que me mantiene escribiendo
Y en tus ojos de huracanes
Vive una niña huérfana de valor
Que mastica las verdades
Y las escupe en baja voz
Tanta maldad, y aún me sabe a poca
Tus costillas como un cuchillo de sierra
Y yo material de carnicería
A veces te mataría
Y te partiría la boca
Con mi boca

Caleidoscopio

a Zoe

Si dice que te calles, cállate
Si dice “borrate”, desaparece
Con la agilidad de los peces
va nadando en otra dirección
y como todos, a veces se ahoga
Un trozo de Cortázar vive en ella
de tantas horas que pasó sola
Pero se reconstruye, se suelta el pelo
Vive, sale cuando hace sol
Y cuando llueve también sale
Ella y sus extremos, y duro el deseo
de agarrarte a sus ojos de cristales
Elegir entre caerte o cortarte
-pero no la dejes ver la sangre-

Heredera de injusticias
Quiero ayudarla a creer
Que no solo es verdad
Aquello que puede ver 
Y ella que me enseñe a mirar
-Que no es lo mismo que ver
Al igual que no es lo mismo
Superar que aprender-
A mirar como mira los libros
Dejando su reflejo jade en el papel

Mientras la vida le inspira un nuevo capítulo
A veces relee con nostalgia el anterior
Ni detectives ni médicos se explican
Lo de su corazón partido en dos
Y a mí, a mí me empaña de alcohol las venas
Y de poemas las lunas llenas
Y las lunas de los coches de la calle
Si brindamos, que sea con una cerveza
Por una vida llena de casualidades 
Podría contarte todo lo que sé de ella
Y solo sería el prólogo de todo lo que nadie sabe

Rojo con razón

Como el vino, vino
Y el carmin de su boca me dejó una mancha
Aún más dificil de quitar
En la única parte blanca
Que yo aún conservaba
Y también se me subio a la cabeza
Y en una de estas vueltas
Que se le da a la vida en estos casos
Me perdí cómo se fue
Aunque yo se lo dijese
Y el semáforo en rojo de sus ojos
Y la sangre de hija bastarda de venus
Que coloreaba su piel
Iba dejando un vestigio escarlata en su fuga
Que decía que no iba a volver
A mí que el corazón se me despista fácil
Y mi razón es a mis actos infiel
Ver como se iba me pareció bien
Esa fue nuestra noche de jodas
Haciendo poesía contra una pared

Paredes

La luna, bocarriba, como una sonrisa sádica
Aquella noche me preguntaba
"¿Qué pretendes, con esa inocencia forzada?
¿Acaso con esa actitud no lo esperabas?"
Y a la niña que me desafió desde el espejo
La llamé Antártida
Y me pidió que escribiese un poema que no fuese triste
Porque le gusta retarme a todo lo improbable
Y el meteorólogo
Que si me iba a poner en plan tormenta
Que le avisara
Últimamente todo cuesta abajo, sin pastillas ni frenos
Qué adrenalina ¿no?
Y yo mientras aquí, helándote de menos

Aunque la noche esté vaga para susurrarme ingenios

Las personas que necesitamos estar a solas
Somos, al mismo tiempo, quienes más tememos a la soledad
Paradójico como un trapecista con vértigo
O un pirata con miedo al mar
Un político altruista
O un masái en la ciudad
Pero a veces nos pasa eso
En estos días en los que la vida se te queda pegada al paladar
Y la tristeza se pone perra y guapa para ti
Y sabes que su boca es veneno
¿Pero cómo no le vas a decir que sí?
Y hay días que le busco tres pies al gato
Y otros que le busco las siete vidas
Para tener siempre ganas de jugame el cuello
Y más tiempo para apreciar el lado bueno
De la sal en la herida
Y el limón en mi saliva
Para quitarle la lencería con la boca a la mentira
Y encontrar el valor que me falta
Para quitar de dentro de mis costillas
El cartel medio roto y mojado de "Se alquila"

Las niñas tristes

La chica del lunar en el cuello, en la cola del supermercado
Ha olvidado coger una cesta, y lo lleva todo apilado en las manos
Posa las yemas de los dedos en la cinta transportadora
Y disfruta un instante del cosquilleo, dejándose llevar
La chica del fondo del autobús, la de los cascos enredados
Suspira empañando la ventana de vaho
Con ojitos de estar escuchando a Calamaro
Se ha pasado su parada, pero ahora viene el solo de guitarra
Así que le da igual
La chica de la acera de enfrente, con la vista fija en el suelo
Va intentando no pisar las líneas, como si fuera una niña de nuevo
No va a ninguna parte, simplemente pasea
Hoy la casa se le cae encima, y se está mucho mejor fuera
La chica que se se fuma un cigarrillo en la terraza
Juguetea con el humo, mientras ve pasar una ambulancia
Ha salido descalza, en camiseta y bragas
Hace un frío polar, pero el frío a veces hace falta
Cuando queman los recuerdos, y se arde de ganas
Con la chica que está esperando que se ponga el semáforo en verde
Y que se aferra al volante como si fuese el borde de un precipicio
Hoy no se ha portado bien la suerte
Y mira por la ventanilla, deseando ser el pájaro
Que se atusa las plumas en el alfeizar de un edificio
Niñas tristes que le dan a las calles su brillo opaco azul
Niñas con los dedos helados de esperar la primavera
Todas llevan en su alma un pedacito de aquella Baby Blue
Pero ninguna me hace amar tanto la tristeza
Como siempre lo hiciste tú

Las almas las carga el diablo

Yo la colilla y el cenicero el abismo
Preparo mi salto para cuando tu boca me consuma
Las causas de esta guerra son siempre las mismas
Odiarnos como siempre, y querernos como nunca
Si seguimos esquivando misiles
Vamos a arrasar con todo el escenario
Ven y firmemos una pequeña tregua
Que tanto kilómetro en medio ya no es necesario
Aunque nunca lo consiga del todo
A veces siento que ya te conozco algo
Desvelar poco a poco el misterio
Rebuscando entre tus ruinas y estragos
Deducir siempre algo más por tus gestos
Tenemos tantas piezas, y aún nos falta tanto... 
Paremos el reloj, que nos separen dos cervezas
Para que todo esto deje de sentirse tan extraño
Sonrisa por fuera, Hiroshima por dentro
Debe caducarnos algún día tanta entereza
Que yo a veces también tengo mis momentos
Que de repente coge y vuela libre mi lengua
Y con su comentario corta el viento
Entonces no respondes, desapareces como el humo
Me intoxicas de ausencia y no me dejas acabar
Disimulas, pero sé que esa es tu forma
En ocasiones como esta, de dejarme ganar
Vacío con un cuentagotas nuestro mar si me lo pides
Pero si me lo preguntas te lo negaré
Hace tanto ya que no me desvistes
Que tengo una segunda capa de piel
Para que donde tocaste no toque otra gente
Lo único peor que dormir sola, es dormir con sábanas limpias
Que huelen a detergente
Y no a ti

Última llamada

Bajo la sábana de mi cama
Están todos mis fantasmas
El viento golpeando la ventana
Son carcajadas del karma
Me escuece la boca de decir verdades
Me faltas, y no me merezco extrañarte
Y si reventaran en mi pecho las ganas acumuladas
Y empapase de recuerdos las paredes de esta mente insana
Sería como ensañarme a puñaladas con mi alma
-Un crimen pasional, creo que algunos lo llaman-
Y esconder en tu cuello mis miedos, ya no es una opción
Se te borró de la boca mi sello, se nos congeló la ola de calor
Y tus lunares, ahora son solares para quien se los pueda permitir
Mientras a mí me caduca en la boca la última frase feliz
Y aún el eco de tus dedos serpentea en mi piel
Y mi orgullo lo he dejado marcado 
A puñetazos en la pared
Ahora que todo ha acabado
No me queda más que perder
Bienvenidos a mi salto al vacío
Nadie abajo me va a recoger
Llena de dudas, no cierra mi maleta
Mientras me prometo que todo va a salir bien
Te juro mi vida, juro que lo intenté
Y te juro aún más fuerte
Que de volver al pasado
Lo intentaría otra vez
Quizás fue cuestión de suerte
Quizás lo hice todo al revés
Pero nunca pretendí dolerte
Ojalá algún día me perdones
Y entiendas que lo que pudo ser
Vamos a inventarlo ahora
No es que no nos vayamos a volver a ver
Es que no vamos a dejar de mirarnos

Me hiciste historia, me hiciste histeria

Fui un cohete hecho trizas
Por los impiadosos truenos de un lamento
Con el miedo y la vergüenza, siempre me da la risa
Y escondo en tu hombro mi cara
Para reír también cuando miento
Un viaje sin destino, demasiado fan de lo incierto
Voy siempre cuesta arriba, dirección al firmamento
Si te sobra rencor, guárdamelo para la cena
Me han dado besos más indigestos
Si te queda valor, no sé aún a qué esperas
En tus mejores pesadillas siempre vas a poder vernos
Aún tengo bajo mis uñas terciopelo de tu espalda
No hay fecha de caducidad para algunos recuerdos
En el reino de las verdades más falsas
La adicción a este juego me hace apostarme los versos
Podemos seguir perdiendo hasta que salgan mejores cartas
Y tragarnos el as de picas clavado en la garganta
Hacerlo bajar con un poco de agua
O puedes dejarme hacer trampas
Y sacar el dos de corazón, que lo tengo bajo la manga

Niña lluvia

El día más inesperado, voy a llover
Me voy a hacer vapor en un suspiro
Me voy a condensar al atardecer 
Y te juro niña, que te voy a llover

Te voy a mojar hasta los huesos
Te juro que voy a llover
Me da igual chocar contra el suelo
Ya no tengo nada que perder
Te voy a pegar la ropa al cuerpo
Cuando empiece a caer
Y te pillaré cuando no lo esperes
Da igual si echas a correr
Porque no tendrás donde esconderte
Cuando te empiece a llover
Y no sabes qué placer
Solo de imaginar mis gotas por tu cuerpo
Yo voy a ser la lluvia, y tú mi tormento
Me voy a resbalar, me voy a calar por dentro
De tu ropa, de tu pelo
Te voy a correr el maquillaje
Para teñirme con tu rimel de negro
No olvides pisar los charcos
Que ahí dejo caer los sueños muertos

Ya el cielo se está nublando
Espero que no lleves paraguas

No es lo que quieres oír, pero es lo que quiero contarte

Ruge de dolor el sol 
porque apenas sales a verle
¿Qué te pasa mi niña? 
No es tan agria tu suerte
Haces que me tiemble la voz
Solo de recordar no tenerte
¿Qué ha hecho que tu sonrisa
se haya vuelto inerte?
No dejes que la decida la gente
Es tuya y es preciosa
Sácala a pasear
Deslumbra las calles
Espanta a las sombras
Con tus brillantes focos verdes
Esmeraldas que me llevan a la muerte
A mí, y a cualquiera que te tiente
Deja de llorar
Arranca las hojas de este capítulo
Ven conmigo, empieza a bailar
Tú sabes poner cachondo al destino
¿Ya ves cómo desaparecen?
Se van tras el primer acorde
En cuanto empieza a cantar tu alma
Los miedos, los fallos, las penas
Se los va a follar el karma
En cuanto te pongas el zapato perdido y me acompañes
Lejos de este baile de máscaras
Quítate el vestido, que así estás más guapa
Que ya quisiera la primavera ser las flores de tus bragas
Cada día de tu vida es tu fiesta
Empieza cuando manda la princesa
Y acaba cuando estés cansada 
(Y yo voy a colarme
Aunque no esté invitada)

Tu burbuja

Muerto el beso, aviva mi rabia
Suspiros que al viento son huracanes
Calada tras calada contengo mi labia
Es ley de vida que la gente no cambie
Si tú eras de la luna y yo ni sé de dónde vengo
¿Cómo íbamos a encontrarnos?
Ahora este poema es todo lo que tengo
Y los mil rincones que elegimos para amarnos
Con las apuestas en contra y el vértigo en la lengua
Cada beso era un salto al vacío
¿Cómo se puede añorar con tanta pena
Algo que nunca fue mío?
Supongo que es a lo que una se arriesga
Al pedirte bailar al borde del precipicio
Que en el baño de un bar vieron comerse la boca
En una noche como esta, a la casualidad y el destino 

A tu ombligo se le ve la luna

Si todo esto es un cuento
Bájale el volumen
Quiero oír como respiras
Ya habrá tiempo de encontrar titiritero
Que le corten los hilos a las mentiras
Que le danzan a tu destino
Como mofa de mi casualidad perdida
Son los viajes a tu piel
Mis vacaciones del mundo
Me encanta que intentes ser cruel
Me encanta tenerte tan profundo
De mi corazón de caleidoscopio
Que con cada golpe se transforma
-Como forma de protección
Reconozco que es catastrófica-
Y me atas a tu presencia
Y tu pulso se muda a mi sien
Y mi boca que hambrienta se marcha
Hasta que vuelva otra vez
Al lugar del crimen
Soy como un asesino fiel
A su lugar de origen
Pero sabes que no me voy
Y menos para no volver
Que cuando estés tumbada en la cama
Y mi cuerpo no esté
Mira mi hueco en la ventana
Si es que mi ausencia te apena
Mi alma está mirándote
Entre calada y calada
Te veo en un ratito
Pórtate bien, nena

Yuanfen

Tú callándote cosas que deberías decir
Yo diciéndote cosas que debería callarme
Qué absurdo llamar “nuestro” a este juego gris
Cuando es solo tuyo, yo lo sé, tú lo sabes 
Y a estas alturas, ya es innegable 
Y mientras yo voy fundiendo mi alma en poemas 
Y espero en vano que me envíes un mensaje
Tú tiras tus dados, el del amor y el de la pena
En el primero sale un ocho tumbado
Y el segundo te dice que te calles 
Mientras tanto, me mantienes ajena
Me cuentas historias a medias 
Para que mi curiosidad se calme
Parece que aún no te has dado cuenta
Que las mejores cosas de la vida
No se consiguen sin arriesgarse
Que me dejé la sonrisa en tu boca
Y que solo la recupero cuando tú también lo haces
Reina de mi último pensamiento por las noches
Y del primero al despertarme
Ya no sé si te engañas, o solo intentas conservarme
Como cuerda de seguridad 
Que te sostiene cada vez que te caes
Que le da igual romperse
Con tal de que tú te salves
Y así estoy, en tensión
Y colgando de mí tu corazón
Entre la salvación y el vacío 
Sabes que no voy a soltarte
Te suplico que hagas lo mismo
Porque me voy a dejar la piel en salvarte
Y si te caes, te juro que caigo contigo
Solo espero que entiendas que si vas a necesitarme
Yo también te necesito
Y voy a poner todo de mi parte
Pero por favor, haz tú lo mismo
Porque hoy me hiciste falta
Y no estabas conmigo

Otro tequila

Las cosas como son
Sería el humo y el alcohol 
Pero anoche mi imaginación
Estaba a mil por hora
Las luces del antro
Prendían en llamas mis pupilas
El lugar tenía encanto
Pero faltabas tú
La gente bailaba ajena
A mi ataque de ausencia
Mi cuerpo sí estaba
Pero de piel para adentro te buscaba
Buscaba tu boca y el olor de tu cama
No era allí donde quería estar
Pero era la alternativa que me quedaba
No seré hipócrita, me divertí
Pero es cierto que la mayor parte del tiempo
Estuve pensando en ti

Protocolo de emergencia

No oigo la letra de la canción,
no le presto atención. 
Mi cabeza va a estallar, 
también mi corazón.
Mi trozo de nostalgia del día. 
Cuando llego a casa, es tarde, 
normalmente más de las dos, 
suelto el bolso y me siento al ordenador. 
Pongo música, escribo. 
Te escribo, porque aunque no lo leas nunca, 
esto es para ti.
Llega el final del día y siempre pienso ¿dónde estás?.  
Y te imagino durmiendo con tu enorme edredón blanco. 
Con la brisa del mar silbando 
por las rendijas de tu persiana. 
Puedo saber hasta en qué postura. 
Es gracioso, me di cuenta que te quería cuando te dejé elegir el lado de la cama sin rechistar. 
Sigue cantando Johnny Cash, 
y me tomo el lujo, por un instante, 
de pensar que tú cada noche también tienes tu ritual. 
No tiene por qué parecerse a este. 
Simplemente que antes de dar tu día por acabado,
de dejar caer el telón, 
te preguntas por un momento dónde estoy yo. 

¿A veces no sientes que dejamos cosas pendientes?

No sé, fue raro
Tenía ganas de llorar
Pero de repente rompí a reír 
A ver
A estas alturas no creo que sea malo
Guardarme cosas que nunca te llegué a decir 
Consumí
Mi tiempo igual que el tabaco
Vapor de mis suspiros que tu mirada empaña
¿Cuál sería mi cara, que preguntaste “¿qué te pasa?”?
Aprender a verle la belleza a la tristeza es una hazaña
Aquella noche en tu terraza, tan cerca del cielo
Que se me estaban enredando las estrellas en el pelo
Bebiendo como piratas, gritando como niños
Haciendo al destino señales de humo con los cigarrillos
Cántame una más con tu voz de arroyo
Que mis ojos rojos no te corten el rollo
Que se me pasa en nada, solo me dura un momento
El tiempo que tarde tu canción en follarse al viento
Dame si te queda un poco de esa risa
Yo te doy mi alma aunque no me la pidas
Y en la calma
De esa noche de verano
Qué remedio
Cuatro sentidos concentrados 
en que no temblaran mis manos
Y el quinto pendiente de tus ojos de incendio

A veces en la vida, no todo es ser paciente
Toca ignorar las cosas que dejamos pendientes
Mitad se piensa, mitad se siente
Hagamos una fiesta de esto que llaman presente